El centro de detención para niños migrantes en el desierto de Texas, creado como una serie de carpas, ha crecido de manera sustancial desde junio pasado, con lo que ahora puede albergar a más de 2 mil menores, de acuerdo con el grupo civil Human Rights Watch (HRW).
En un análisis basado en imágenes de satélite, HRW asentó que el centro de detención, ubicado en el desierto de Tornillo, se ha expandido de 28 a 101 carpas, cada una de las cuales tiene capacidad para 20 niños.
El centro de detención fue utilizado por primera vez este verano para albergar a niños separados de sus padres, al inicio de la política llamada “tolerancia cero”, mediante la cual los inmigrantes que cruzaban la frontera de manera ilegal eran separados de sus hijos.
Después de la revelación del HRW, el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos declaró que el incremento en el número de tiendas de campaña era necesario para albergar a los niños que cruzan la frontera sin la compañía de familiares.