Con unas palabras de oración fue como comenzó la ceremonia para la bendición del agua y el Cirio
Córdoba.- Las brazas fueron encendidas para generar el fuego, mismo que encendería el Cirio Pascual posteriormente frente a decenas de feligreses quienes arribarían con gran devoción para presenciar el sagrado acto.
Poco a poco, la ciudadanía católica fue llegando para rodear el fuego y estar presentes para la bendición del agua y del Cirio.
A las 20:15 horas el obispo Eduardo Patiño Leal acompañado de seminaristas, acólitos, así como del párroco Domingo Ortiz Medina llegó para aproximarse al fuego y así encender el Cirio.
Con unas palabras de oración fue como comenzó la ceremonia para la bendición del agua y Cirio.
“Pedimos Señor que bendigas esta agua para que pueda consagrar en tu gracia y servir con fidelidad”, expresó el Obispo frente a la feligresía que se encontraba en los alrededores del atrio de la Catedral, y quienes con fe y devoción uno a uno se formaba para poder encender su cirio.
Una vez encendido el Cirio Pascual, el Obispo acompañado del padre Domingo y del grupo de acólitos entraron en procesión a la Catedral de la Inmaculada Concepción para efectuar la misa tradicional.