Orizaba.- Se realizó la misa por la Jornada Mundial por el Enfermo, pidieron católicos por quienes sufren padecimientos terminales; además, por quienes tienen alguna discapacidad, por los que sufren alcoholismo, así como por enfermos sexuales que atentan contra las mujeres, indicó el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez.
Consideró que las enfermedades del espíritu terminan afectando al cuerpo, pues aparentemente no se notan, como ambición, envidia, egoísmo y soberbia, pero a veces provoca malestares, por ejemplo, gastritis o colitis.
“Nosotros debemos recordar que el hombre está conformado por una unidad, de cuerpo y espíritu, algunos dicen cuerpo y mente; entonces cuando pedimos por la salud de los hombres y las mujeres nos referimos a la salud de forma integral, desde física hasta mental”.
Mencionó que recordando las palabras del Papa “a la luz de la cruz la enfermedad se ilumina de un modo diferente y por eso nos recuerda el Evangelio la cita: ‘Hijo ahí está tu madre, madre ahí está tu hijo’, para recordarnos que nosotros podemos tener una fortaleza en la cruz para entender mejor a la enfermedad”.
Durante la misa, los asistentes oraron por toda la humanidad, los enfermos terminales, por quienes cuidan a un paciente, para que Dios les dé paciencia y fortaleza, por los enfermos del alma para que encuentren paz espiritual, por los ancianos que no son queridos para que sus familiares los acompañen y así sientan ese amor, entre otros.