Juan José Enríquez
El Buen Tono
Río Blanco.- En Río Blanco no se atienden temas de inseguridad, la Policía Estatal, adscrita a este municipio, sólo obedece órdenes del alcalde, Ricardo Pérez García, que es la de cazar y perseguir a migrantes centroamericanos que llegan a la colonia Modelo, para subir al tren y alcanzar llegar a la frontera con Estados Unidos.
Vecinos del lugar y de la Ricardo Flores Magón acusaron a las autoridades policiacas y de Migración de propiciar la muerte de un senegalés, que falleció el pasado fin de semana en el canal Virita, cuyo cuerpo fue encontrado atorado en la compuerta de la planta hidroeléctrica.
Denunciaron que todos los días la Policía Estatal lleva a cabo redadas de migrantes, en donde los abusos son comunes, pues los detenidos reciben golpes y son llevados a la fuerza para regresarlos a sus países.
“En las madrugadas nada más oímos las carreras, los gritos de los indocumentados que les dicen que nos e los lleven y también cuando los golpean, pero uno no puede ni abrir, si nada más cuando medio abre uno la cortina los policías nos gritan”, expresaron las fuentes.
Añadieron que han sido testigos de cómo los perseguidos se arrojan al canal en su desesperación de no ser alcanzados por los gendarmes estatales, pero lo que no saben es que al meterse al afluente ya no salen con vida, pues la corriente de agua es tan fuerte que los arrastra hacia abajo y terminan sin vida; lo más grave es que los elementos no hacen nada, ni para atraparlos ni para ayudarlos, “es algo grave”.
Los ciudadanos señalaron que si la Policía y el personal de Migración van hacer operativos para detener a los migrantes que lo hagan, pero que no los lastimen, porque eso ya es un abuso contra esas personas que huyen de sus países por necesidad.