Orizaba.- Se pide un castigo ejemplar a los ciudadanos que contaminan el río Blanco, el Jamapa, el Metlac, la Carbonera e incluso también a las autoridades que permiten esto al igual que los tiraderos a cielo abierto, como es el caso del municipio de la Perla y Mariano Escobedo, entre otros, de lo contrario la contaminación que llega a los mares continuará a pesar de las campañas de limpieza, así lo manifestó el integrante de Grupos Unidos de Montañismo del Valle del Río Blanco, César Silva Reyes
Mencionó que los integrantes del grupo al que pertenece y debido a las caminatas que realizan por la montaña han sido testigos del problema tan grave de contaminación que hay en los municipios de las zona alta en las faldas del Pico de Orizaba, comunidades extensas en donde se da el nacimiento de “todos los grandes ríos de este Estado”.
Entre ellos, el río Chiquito que baja por Loma Grande, Maltrata, Nogales y se une con el agua de la laguna de Nogales; además, está el de La Carbonera, el río Orizaba, el río Metlac. En una reciente caminata de Chocamán al cerro de Coscomatepec cuando se toparon con el río Jamapa “un poco crecido por las lluvias, nos sorprendió la infinidad de basura flotando sobre la corriente ¿Y de dónde viene esa basura?, pues viene de la parte alta de las montañas ¿Quién está rogando esa basura a los ríos?, la gente que radica en la zona serranas y si eso hace la gente de la Sierra ¿Que no va a ser la gente de la ciudad?”.
Indicó que todos estos ríos confluyen con el río Blanco, menos el Jamapa ya que este va directo al mar “y a ellos se le suman los ríos que vienen bajando de la parte alta de Zongolica y del Estado de Puebla.
A este problema, se le suma los tiraderos a cielo abierto de basura y uno de ellos se encuentra en la parte de atrás de la iglesia de La Perla, “ahí está un tiradero que da al río Orizaba y si vamos buscando vamos a encontrar más, en Mariano Escobedo, en Ixhuatlancillo y también en Orizaba, lamentablemente no hay conciencia de la ciudadanía para cuidar nuestro medio ambiente hasta que la naturaleza no lo revierta como ya está sucediendo”, concluyó.
