Córdoba.- El día de ayer se reunieron en la Unidad Deportiva del Casino Español, ex presidentes interesados en resolver el problema nunca antes visto, en el que está envuelto este club por el mal comportamiento de algunos niños hijos de socios, que provocó la renuncia de Jorge San Martín quien lejos de huir debió haberlo resuelto, sin embargo, y a pesar de haber recibido más de 250 firmas de socios activos exigiendo un castigo ejemplar, la directiva presidida por Luis Miguel Pontón sigue dando largas para poner una sanción, primero pidió la solicitud por escrito y ahora les pide pruebas, como si no pudiera ir al Ministerio Publicó para que se las den, o como si no bastara que este tema es ya ampliamente conocido no sólo por los socios si no por la mayoría de los cordobeses, lo que buscan son pretextos para seguir haciéndose tontos argumentando que esto ya es un problema político, sin embargo, después de las llamadas recibidas a esta casa editorial, nos queda claro que esto no es cuestión de partidos ni preferencias electorales, se trata de educación, de valores y principios que han venido ignorando por interponer intereses de unos cuantos ante los intereses de la mayoría de los socios, esto es cuestión de respeto para quienes aplicando el valor de la acertividad decidieron firmar esta petición que consideran justa, en respuesta, algunos de estos socios firmantes han recibido amenazas verbales y vía correo electrónico por algunos de los padres de los niños implicados, como si el problema fuera ¡de quienes lo dicen y no de quienes lo hicieron! Y, si es cierto que al seguir actuando de esa manera solapadora les han robado la tranquilidad a muchas madres de familia quienes temerosas no quieren mandar a sus hijos a ese club, bien podemos asegurar que el problema real lo tienen los padres de los niños que lejos de educar, se convierten en padres solapadores y permisivos de un problema grave que es incluso un delito penal, dando así no sólo un mal ejemplo a sus hijos sino también a los demás niños quienes por desgracia están ya enterados del problema. Toda acción debe provocar una reacción, y aquí hoy, el Casino Español pretende hacerse omiso o esperar a que pasen las elecciones cuando esto no es de política es de EDUCACION!
PARA SABER
Están esperando a que pasen las elecciones argumentando envidias, vemos que la directiva no tiene ni el criterio para diferenciar las envidias políticas de la educación.
Sin embargo, si esto fuera como lo pretenden hacer ver, en cualquier país civilizado y educado sería suficiente para haber provocado la renuncia de quien hoy pretende ocupar el cargo de síndico, y no tanto por lo que haya hecho o no su hijo, ¡sino por sus cínicas declaraciones y su actuar!
Este no es el perfil de los gobernantes que quieren los cordobeses.