Orizaba.- No tiene funcionabilidad el secretario de Salud, Juan Antonio Nemi Dib, ya que tiene conocimiento de los problemas que aquejan a la Secretaría de Salud en la zona, pero no resuelve nada “y no sabría ni cómo, porque no es doctor” aseguró el dirigente de la Subsección 47, Enrique Ravelo Pereda, abundó que de la dependencia está haciendo un destrozo.
En este sentido abundó que el sector Salud se encuentra en su peor crisis, sin materiales e insumos, con infraestructura en malas condiciones, con aviadores en muchas áreas, administradores incapaces de hacer bien su trabajo, y adeudando miles de pesos a los trabajadores y auxiliares médicos.
Abundaron que el pasado miércoles arribaron a sus oficinas en la Jurisdicción Sanitaria, auxiliares médicos de las comunidades a reclamar una vez más el pago de su gratificación por parte del programa Oportunidades, dinero que presuntamente ya había llegado de Xalapa a la Jurisdicción Número 7 y del que se recibió contra-orden de último momento, que tenía que ser devuelto.
Dijo que son un promedio de 23 trabajadores a los cuales se les adeuda 10 mil 300 pesos a cada uno del programa Oportunidades; a las 168 auxiliares de salud, se les debe 9 meses de pago, que equivalen a 4 mil 500 pesos por cada una, y que suman en total 1 millón 300 mil pesos.
En cuestión de medicinas, dijo que por el momento se están dotando las distintas unidades médicas en las comunidades, sin embargo, existen más carencias como las malas condiciones en que se encuentran las instalaciones; “tenemos filtraciones, hay carencia de instrumental, el poco que se tiene está oxidado, hay unidades que no tienen agua, y cuando se hacen detecciones de cáncer cérvico uterino todos esos espejos se quedan sucios porque no se pueden lavar, y se retrasan las siguientes detecciones porque no hay con qué hacerlo. Mandan espejos vaginales desechables que no son muy útiles, y retrasa las detecciones”.
Indicó que con estos instrumentos los trabajadores tratan de hacer lo que se puede, por lo que asisten hasta las unidades médicas, en ocasiones con dinero de su bolsillo, pero ahora también se encuentran con que en las quincenas ya tienen igualmente retrasos.
Reiteró que existen carencias, las cuales las tienen marcadas, “hay mucha inconformidad de parte de la población, en Zongolica se quejan constantemente”, y por desgracia la población se molesta con los trabajadores, quienes no tienen responsabilidad, porque es totalmente de la dependencia.
Concluyó que por si toda esta situación no fuese grave existen “aviadores” en la dependencia, como por ejemplo: “el administrador de la Jurisdicción de Zongolica, es papá de un trabajador muy cercano al secretario de Salud, de apellido Kruss”, de quien incluso se le apoda “Force One” porque es el máximo aviador que se tiene en la Jurisdicción, concluyó.
Omar Celiseo V.
El Buen Tono