De la Redacción
El Buen Tono
Ixtaczoquitlán.- La autopista 150 D Córdoba-Orizaba únicamente recibe paliativos del personal de Caminos y Puentes Federales (Capufe), cada vez que el “trébol” de Escamela registra anegamientos, pero carece de acciones concretas que resuelvan el problema.
Automovilistas dieron a conocer lo anterior, y acusaron que el sábado tuvieron que esperar hasta 40 minutos para ingresar a Orizaba, “son una desesperación las filas de vehículos que se forman sobre la carretera federal y la autopista”.
Explicaron que quienes vienen de Córdoba deben soportar los embudos que se hacen antes del puente de Metlac, por las obras que el organismo realiza en esa zona desde el año pasado.
“Los viernes en Córdoba, elementos de Tránsito y de la Policía hacen el operativo del alcoholímetro durante la tarde-noche, luego hay que soportar los embotellamientos para salir de la ciudad rumbo a Fortín, los del puente de Metlac, las inundaciones a la entrada de Orizaba, sin omitir los accidentes”, expresaron.
Indicaron que en ocasiones requieren de hasta dos horas o más para circular por un tramo pequeño, “todo por los holgazanes de Capufe, y porque nadie protesta”.
Peligro
Dijeron que el riesgo en la zona del “trébol” de Escamela es latente, porque cada vez hay un mayor desprendimiento de rocas y ramas que obstruyen la vía de comunicación.
Sin embargo, y pese a que Capufe realiza constantemente el dragado de la “laguna” que se forma por las intensas precipitaciones, el problema afecta el tránsito, daña el estado físico de los vehículos, pero nadie se hace responsable.
“Todos aguantan como burros domesticados”, manifestaron.
