Córdoba.- La Jurisdicción Sanitaria VI mantiene un registro de 126 parteras, de las cuales, sólo 63 están certificadas para la atención del parto en sus comunidades.
El resto será capacitado para lograr el reconocimiento de certificación y principalmente garanticen la atención oportuna en situaciones de riesgo de la embarazada.
De acuerdo con el jefe jurisdiccional, Jorge Arellano del Olmo, aunado a las 63 parteras certificadas, el registro contempla al menos 30 más que ya recibieron un curso de preparación.
Explicó que aún ante los avances en materia de salud, se reconoce que la labor de las parteras mantiene demanda principalmente entre las mujeres de las zonas rurales, aunque en municipios como Córdoba aún hay registro de mujeres -sin especificar cifras- que ofrecen este servicio.
“Tenemos 93 parteras certificadas, pero el resto son mujeres que ya tienen varios años prestando el servicio. Lo ideal es que todas estén certificadas por lo menos una vez o que tengan un curso; se les da un botiquín y lo necesario para que puedan checar y atender al paciente” dijo Arellano del Olmo.
Durante los últimos años con el auge y promoción de los partos naturales -en las casas- alejados de los métodos científicos y del manipuleo fármaco al que se somete a las mujeres al momento del parto, cada vez hay más grupos que lo fomentan en los hogares.
Sin embargo, Arellano insiste que lo ideal es que la mujer reciba su control prenatal y que durante el alumbramiento reciba el seguimiento de personal médico capacitado.
Señaló que una partera aun cuando cuenta con la certificación, no está facultada para suministrar ningún tipo de medicamento. Por ello insiste en la necesidad de acercarse a ellas para que si es necesario, se brinde el acompañamiento hasta los hospitales a fin de reducir los riesgos de complicación.
Cada uno de los partos que estas mujeres atienden son reportados a los Centros de Salud de las comunidades más cercanas, con la capacitación que en breve se les brindará, se busca que éstas aprendan a detectar signos de riesgo como los sangrados, la preeclamsia, eclampsia, a fin de evitar complicaciones mayores al momento del alumbramiento.
