Amatlán.- Lo que sería un domingo normal y familiar en el Centro de Reinserción Social de La Toma, como cada ocho días, terminó en una pesadilla para los familiares de más de mil internos y luto para los de seis elementos de la Policía Estatal, así como un civil, aunado a un despliegue de más de 300 efectivos de las diferentes corporaciones policiacas y paramédicos, culminando con la presencia del Gobernador del Estado y el traslado de cuatro reos de alta peligrosidad.
Un motín en el nivel 3, edificio E, iniciado alrededor de las 22:00 horas del sábado, el cual originó un incendio por la disputa del poder en el interior o porque unos reos de alta peligrosidad serían tras-ladados; según la información de las autoridades estatales, fueron las causas que originaron este amotinamiento. Otra versión, es que todo inició a raíz de una fiesta que realizaron algunos reclusos.
Lamentablemente, cuando un grupo de unos 50 elementos policiacos estatales y municipales de la ciudad de Orizaba, al mando del delegado Carlos Cárcamo y Juan Ramón Herebia ingresaron, ya los estaban esperando los reos de ese nivel, los cuales, según versiones, encerraron a los uniformados y a un civil, prendiéndole fuego a unos colchones y originando la muerte de seis elementos y una persona que ayer por la tarde aún no era identificada de manera oficial.
A través del número de Emergencias 911 y los radios de banda privada de las unidades policiacas, se daba a conocer sobre este motín, lo que originó que en pocos minutos arribaran al centro penitenciario agrupamientos de efectivos policiacos, Seguridad Pública del Estado, Fuerza Civil, Marina y Policía Federal; antes de las 23:00 horas ya había un cerco alrededor del penal de media seguridad La Toma.
El sonar de las sirenas de las patrullas y el de las torretas de las ambulancias de la Cruz Roja, Cruz Ámbar, Protección Civil (PC), Capufe y de otras instituciones, daban a conocer sobre un problema grave al interior del mencionado centro penitenciario. Hasta ese momento sólo se hablaba de un motín y personas lesionadas, pero no de fallecidos.
Para la medianoche, los accesos al penal, sobre la carretera que va de Trapiche Viejo y la Toma, estaban prácticamente sellados por los efectivos policiacos, los cuales prohibían el paso a toda persona ajena y la revisión de todo tipo de vehículos que transitaban por ese lugar. Durante la madrugada, sólo se podía apreciar la entrada y salida de unidades oficiales, así como de ambulancias y personal de Bomberos que ingresó con extintores para controlar el fuego, sin embargo, para las 03:00 horas, trascendió la muerte de varias personas, entre ellas policías y civiles, así como menores de edad. Con la presencia del Secretario de Seguridad Pública del Estado, Jaime Téllez Marié, el Fiscal General de la Entidad y el Gobernador, se confirmó que dicho motín dejó como saldo seis elementos de la Policía Estatal falle-cidos, así como un civil y varios lesionados, de los cuales la mayoría fueron policías trasladados a diferentes sanatorios de la ciudad de Córdoba para su atención inmediata, sobre todo de los más graves.