
Adriana Estrada
EL BUEN TONO
Orizaba.- Una grave falta de coordinación en los sistemas de semáforos de la ciudad ha convertido las calles en un escenario de riesgo constante para peatones, revelando fallas críticas en la gestión de movilidad y seguridad vial. El ejemplo más alarmante se ubica en el cruce de Sur 25 y Oriente 6, donde la desincronización entre las señales vehiculares y peatonales expone a los transeúntes a situaciones potencialmente mortales.
En dicho cruce, el semáforo peatonal y el vehicular operan de manera simultánea, enviando señales contradictorias, cuando los automóviles reciben luz roja para detenerse, los peatones también obtienen un alto, impidiéndoles cruzar, pero al activarse el verde para los conductores, el mismo color se ilumina para los peatones, incitándolos a avanzar justo cuando los vehículos arrancan, esta incoherencia obliga a los transeúntes a elegir entre desobedecer el semáforo o arriesgarse a ser atropellados.
