Orizaba.- Los niños que son violentos en la escuela replican lo que ven en casa, razón por la cual la Fundación Libre de Violencia busca recuperar los valores que se han perdido, mediante pláticas que permitan la prevención del bullying en los colegios, expresó la presidenta de la Fundación, Miriam Méndez Jiménez.
Existen palabras o hechos clave que merecen ser focos de atención, tales como condicionar la amistad a uno de sus compañeros o compañeras si no le hacen alguna broma, que los induzcan a hacer daño o una grosería a otra persona, porque esto comienza a ser un tipo de violencia que tiende a ser repetitivo, pero muchas de las veces lo traen de casa.
“Es algo que se hace de manera diaria y es común, pero al paso del tiempo se vuelve repetitivo, continuo, lo que genera una bola de nieve, de esa violencia que se va generando a otro nivel, cuando somos adultos se pasa la violencia a todos los sentidos”, refirió.
Por esa razón es que se han redoblado los esfuerzos de prevención, siendo su campo de acción las escuelas que respondieron a la convocatoria: “Con algunas diferencias, que el respeto y la tolerancia nos una”, en donde están las primarias: José Martí, de Nogales, Lázaro Cárdenas y Jesús Reyes Heroles, de Orizaba, para que ellos mediante carteles explicaran su forma de ver esta problemática social.
Expresó que en el caso de la escuela José Martí, de Nogales, se trabajó en un pabellón con los alumnos en donde se les explicó que ellos deben contribuir desde esta área a la prevención de la violencia y en caso de que algún estudiante incurra en palabras que ofendan o lastimen a otra persona, inmediatamente se le haga saber que está haciendo mal.
Añadió que esto forma parte de las actividades diarias de prevención, pero que se refuerzan al conmemorarse el próximo 25 de noviembre el Día Internacional Contra la Violencia de la Mujer, con la denominada Semana Naranja, que hace alusión a esta fecha significativa que ha logrado que por lo menos haya un seguimiento a los casos de violencia que llegan a la Fundación, y sumando tres hasta ahora, cuyas víctimas son atendidas psicológicamente.