Sandra González
EL BUEN TONO
Orizaba.- El líder del Grupo Regional Independiente de Taxistas de Orizaba (GRITO), Jairo Guarneros Sosa, acusó al presidente municipal de ser un mentiroso, pues la multa de 100 mil pesos que le impuso la Dirección de Transporte Público por cada camión detenido, fue por ofrecer el servicio de pasajeros sin autorización, violando el Artículo 177 de la Ley 589, y no por las causas que él alegó, como la falta de seguro, el estado de ebriedad del chofer y la ausencia de licencia.
Añadió que “no le quisieron devolver la unidad porque está a disposición de la Fiscalía y, según entiendo, ese es el proceso que debe seguir por cometer el delito de usar una unidad para prestar el servicio de pasajeros no autorizada por la Dirección de Transporte Público, es el artículo 177”.
Explicó que “el Artículo 225 del reglamento de la ley 589 de Transporte Público, en su fracción V, señala que la categoría E de las multas de transporte público será de 1000 salarios mínimos y es aplicable a la falta contenida en el Artículo 177 del mismo reglamento ya mencionado, que señala que se prohíbe dar un servicio de transporte sin contar con la concesión correspondiente”.
Afirmó que “el presidente municipal ha demostrado que las leyes y normas que no le favorecen, se las pasa por el ‘arco del triunfo’, ha recurrido a una serie de mentiras, medias verdades y a buscar victimizarse, y que estamos ante una administración que se siente dueña de Orizaba y que ha mostrado un total autoritarismo”. Agregó que hay “una sumisión impresionante de su cabildo, que le ha permitido que en una sesión oficial del ayuntamiento de Orizaba muestre estos rasgos”.
RESPONSABILIZA AL ALCALDE DE LO QUE LE PUEDA PASAR
Asimismo, y luego de que el alcalde Juan Manuel Diez Francos declarara que “Jairo, un tipo que no debería de vivir en Orizaba”, el luchador social recordó que esta no es la primera vez que él lo señala como persona no grata, pues ya lo hizo cuando manifestó su oposición a la colocación de la estatua de Porfirio Díaz en la Plaza Bicentenario.
“Posterior a eso yo sufrí una agresión armada, la respuesta fue con un balazo en el pecho. Si yo vuelvo a ser nuevamente blanco de ese tipo de agresión en su municipio, probablemente habría una responsabilidad de las autoridades municipales y, concretamente, del presidente municipal. Con esta van tres veces que el señor pretende desterrarme de Orizaba”.
Finalmente, refirió: “Aquí me parece que la idea es que él es el dueño absoluto de Orizaba, es un simple presidente municipal. Si bien lo dije, soy nacido en Orizaba, criado en Río Blanco, y ahora tengo la residencia desde hace más de 15 años. Me parece que él no es quién para decir en dónde tengo que vivir. Si nos ponemos en ese plan, podría yo decir que él, por su origen, no debería ser presidente municipal. Le decimos que no estamos en la España feudal como nos la quiere hacer creer con su Casavegas”.
