
AGENCIA
McAllen, Texas.- Durante meses, un grupo de supuestos músicos regiomontanos viajó sin problemas de Monterrey a Houston para realizar presuntas presentaciones. Sin embargo, la fachada de banda en gira encubría una operación de tráfico de drogas que quedó al descubierto el pasado lunes 24 de febrero en la frontera entre México y Estados Unidos.
Agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) detuvieron en el Puente Internacional Reynosa-Hidalgo un autobús Volvo blanco en el que viajaban seis hombres. Durante una inspección secundaria, los rayos X detectaron anomalías en el tanque de gasolina, donde los oficiales encontraron 80 paquetes con 90.71 kilogramos de cocaína.
El conductor, Pedro Edgar Jaúregui Ortiz, intentó justificar el viaje afirmando que transportaba a integrantes de una banda musical que se presentaba en Texas. Sin embargo, tras ser interrogado por agentes de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), terminó confesando que todos formaban parte de una red de tráfico de drogas.
Las autoridades determinaron que este no era su primer cruce. Desde octubre de 2024, el grupo había ingresado a Texas entre dos y cuatro veces al mes utilizando la misma ruta y autobús, siempre conducido por Jaúregui. Además, se reveló que en inspecciones previas ya se habían detectado irregularidades en el vehículo mediante rayos X.
Ahora, Jaúregui y sus seis acompañantes, identificados como Roberto, Miguel, José Alfredo, Luis Ángel, David Alexis y Raúl Cruz, enfrentan cargos por conspiración para importar sustancias controladas. Permanecen bajo custodia federal en espera de su proceso judicial en la Corte de Distrito Sur en McAllen, Texas.
