Córdoba.- Un ebrio taxista puso en riesgo la vida de otros conductores, cuando intentó escapar del alcoholímetro a toda velocidad; tras una persecución elementos de la Policía Vial y de Tránsito del Estado lograron detenerlo y ponerlo a disposición de las autoridades.
Sobre el bulevar Peñuela-Córdoba a la altura de un conocido centro comercial, autoridades de seguridad realizaban el operativo alcoholímetro para detectar a conductores ebrios.
Fue ahí cuando el conductor del taxi Nissan Tsuru con número económico 679 y con placas 9573XCZ del estado, del sitio Walmart, quien se negó a dar su nombre, y quien iba acompañado, se percató del operativo.
En un intento desesperado por no pasar por donde se encontraban los oficiales, el ruletero se salió de la fila brincándose la seguridad, para emprender huida con dirección de Córdoba hacia Buena Vista, y así poder evitar ser retenido.
Sin embargo, oficiales que se percataron del hecho rápidamente comenzaron a perseguirlo a bordo de dos unidades; a pesar de que le pedían que se detuviera, el ruletero se negó a hacerlo poniendo en riesgo la vida de otros automovilistas y de él mismo y su acompañante.
Fue a la altura del Hospital Regional de Córdoba cuando los oficiales le dieron alcance y finalmente el taxista se detuvo; al ponerlo a prueba hallaron que el taxista sobrepasaba los límites permitidos de alcohol en la sangre, por lo que fue subido a una patrulla.
Su acompañante negó que anduvieran tomados y pidió a los oficiales que soltaran al taxista, sin embargo, las condiciones lo delataban, pues éste se encontraba orinado y no podía ni sostenerse por sí sólo.
En una revisión, los oficiales hallaron dentro del vehículo una botella mejor conocida como “pata de elefante” y vasos con los cuales se presumía andaban bebiendo. El chofer así como la unidad quedaron a disposición del Ministerio Público.
Cabe hacer mención que en este mismo operativo fueron detenidos por rebasar los límites de alcohol permitidos para conducir, otros cuatro conductores de transporte público en su modalidad de taxi.
Los taxis fueron remitidos a un corralón y sus conductores puestos a disposición del Ministerio Público; ambos serán liberados después de pagar una sanción económica.
Miguel Ángel Contreras
EL BUEN TONO
