Zongolica.- En medio de discriminación para quienes buscan preservar los rasgos característicos de la zona indígena y la falta de transmisión en las generaciones de su esencia, se celebró el Día de la Raza en Zongolica, donde varios pobladores nativos del lugar sienten pena por su lengua o tradiciones, coincidieron la exdiputada federal Lucía Ortega Tzitzihua, el cronista municipal Humberto Josué Altamirano Hernández y la profesora Florinda Nogales Martínez, directora de la escuela primaria bilingüe 16 de Septiembre.
“Zongolica y Texhuacan, en las cabeceras municipales, son lugares donde han perdido la identidad, la lengua, tradiciones y costumbres, existen casos en que los niños se avergüenzan de portar un traje regional, mientras los adultos de cualquier edad o profesionistas, rechazan que se utilice en una escuela el traje regional como uniforme oficial”, lamenta Ortega Tzitzihua, exintegrante de la Comisión de Asuntos Indígenas en la pasada Legislatura Federal.
Mencionó que en Tlaquilpa, Astacinga, Tehuipango, Soledad Atzompa o Mixtla, se conservan expresiones de fe que datan de siglos antes de la llegada de los españoles y la transculturación, además de que las nuevas generaciones aprenden de sus abuelos o papás, e incluso piden materiales didácticos a dependencias como la Academia Veracruzana de las Lenguas Indígenas.
“En la mayoría de comunidades se conservan tradiciones y costumbres, en la Sierra sí hay respeto a la identidad de las etnias, pero si acudes a Texhuacan, ningún joven o niño habla la lengua materna”, aseguró la actual responsable del IVEA en la región montañosa.
Para Humberto Altamirano, cronista del pueblo, el problema radica en el poco interés de los padres y abuelos, por enseñar a las siguientes generaciones los rasgos culturales que caracterizan a los nativos de la zona.
“Se está reduciendo la población nahua-hablante, al carecer de su preservación desde los hogares. En las comunidades también ya es menor el número de padres de familia que inculcan a sus hijos los distintos elementos que integran las raíces de nuestra gente”, expresó.
Al respecto, la directora de la única escuela bilingüe ubicada en la cabecera, Florinda Nogales Martínez, sostuvo que la sociedad de esta ciudad está perdiendo el respeto a su riqueza ancestral y como institución educativa se encuentran luchando por revertir la situación, a través de la enseñanza.
Durante la entrevista, recuerda que los alumnos utilizan el traje regional los días lunes como uniforme y rinden honores a la Bandera entonando en náhuatl el Himno Nacional. Asiente que han sido presa de discriminación por otras escuelas y reconoce que hasta en los recursos o programas, no son incluidos por ser una escuela indígena.
“Hay maestros que trabajan en la enseñanza indígena, que mandan a sus hijos a escuelas que no tienen estas características porque no quieren que porten el traje regional. Desafortunadamente, los padres no buscan preservar las tradiciones, olvidando que nuestros pueblos originarios se caracterizaban por ser respetuosos y tener valores que les permitían ser organizados y pueblos desarrollados”, dijo Nogales Martínez.
La profesora, resaltó la pluralidad que se vive en nuestro País, reflexionando sobre la urgente necesidad de rescatar la cultura y raíces en una sociedad actual llena de vacíos por la falta de identidad.
“Estamos nuevamente en el encuentro de dos culturas, donde percibimos que la familia, valores y raíces, se enfrentan a la globalización que nos afecta a través de la tecnología mal ocupada, como los celulares o las redes sociales, que en lugar de impulsar la comunicación y una compartición de nuestra esencia, nos aleja de quienes somos. Es necesario volver nuestros ojos a la cultura y sus valores, nosotros como escuela nos basamos en esa directriz, no obstante, es difícil cuando el ciudadano común rechaza sus mismos rituales o tradiciones”, concluyó la docente.