AGENCIA
Internacional.- Una peligrosa tendencia viral ha surgido en TikTok, donde algunas personas se están golpeando la cara con objetos contundentes en un intento de mejorar su apariencia facial.
Esta práctica, conocida como “bone smashing” (literalmente “aplastamiento de huesos”), implica golpear la cara con martillos, botellas, masajeadores u otros objetos contundentes con la esperanza de lograr una mayor belleza.
Según los promotores de esta tendencia, estos golpes causan microfacturas en el rostro, lo que a su vez genera callo y hace que los huesos parezcan más grandes.
A pesar de las afirmaciones de algunos “TikTokers” y seguidores del “bone smashing”, no existe evidencia científica que respalde la efectividad de esta práctica y sí existen riesgos significativos para la salud.
Algunos defensores de esta tendencia citan la Ley de Wolff, formulada por el anatomista y cirujano alemán Julius Wolff en el siglo XIX, como justificación para sus acciones. Según esta ley, los huesos están en constante remodelación, y aplicar fuerza mecánica o estrés físico a los huesos puede aumentar la tasa de remodelación y, en teoría, resultar en huesos más fuertes y gruesos. Sin embargo, aplicar fuerza excesiva a los huesos faciales puede causar fracturas graves y daños irreversibles.
Además, la cara no se compone solo de huesos, sino que incluye diversos tejidos blandos, tejidos conjuntivos y globos oculares que podrían sufrir daños irreparables. Golpearse la cara con objetos contundentes también podría provocar hemorragias y lesiones con alto riesgo de infección.
A pesar de las advertencias de expertos en salud y médicos, los videos que promueven el “bone smashing” han acumulado millones de vistas en TikTok, lo que genera preocupación por la seguridad de los usuarios que podrían verse influenciados por esta peligrosa tendencia.
