La laguna azul es el monumento más visitado de Islandia y uno de los lugares más fascinantes de la “isla de Hielo y Fuego”. Este impresionante balneario geotermal es, sin duda, uno de los lugares que no te puedes perder durante tu viaje a Islandia. Conocida como la Blue Lagoon en inglés o Bláa Lónið en islandés, la laguna azul está situada en la península Reykjanes, cerca del pueblo de Grindavík. Su ubicación entre campos de lava y hermosos paisajes y los vapores provocados por la diferencia de temperatura entre el agua y el entorno hacen de la laguna un espectáculo natural realmente extraordinario.
La laguna azul fue descubierta a finales de los años setenta. Desde entonces, el interés de los turistas y de los islandeses no ha parado de crecer. En la actualidad, este balneario es visitado por miles de personas cada año. Durante los últimos 5 años, la laguna azul ha sido votada en el “Conde Nast Traveller” como el mejor balneario curativo de todo el mundo.
La laguna goza de un ecosistema único reconocido mundialmente debido a las propiedades medicinales y curativas de sus aguas geotermales. En este sentido, la laguna azul se ha convertido en un lugar de gran importancia para el turismo de salud. El barro de la laguna tiene como componentes principales el azufre y sílice, que son recomendados principalmente para el tratamiento de la psoriasis. El agua goza de unas temperaturas agradables, con una media de 37-39°C / 98-102°F y proviene de la cercana planta de energía de Svartsengi, que se mezcla con el agua del océano.
