Orizaba.- El 14 de noviembre del presente, el arzobispo de Tlalnepantla, Carlos Aguiar Retes, recibirá de parte del Papa Francisco el capelo cardenalicio, luego de que durante el rezo del Angelus, el domingo pasado, el Santo Padre anunciara la lista de los nuevos clérigos que alcanzarán el rango de Cardenales, ante ello, el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez, expuso que forma parte de la congruencia que ha predicado el máximo jerarca de la Iglesia Católica.
Añadió que este hecho sorprende porque al menos en el caso de nuestro País no está nombrando a un Arzobispo de la zona metropolitana, sino de una periferia, lo cual tiene una interpretación profética, orientada a servir a las zonas más necesitadas.
“Si nombró a Alberto Suárez Inda como Cardenal y en Morelia, el corazón de tierra caliente, el corazón de una zona en donde está concentrado el narcotráfico, es algo profético, porque están sufriendo el asesinato de un sacerdote de su Diócesis. Ahora, nombra a uno cercano a la Ciudad de México, pero en zona periférica, en área marginal, en congruencia con lo que el Papa dijo, sobre que hay que ir a las zonas existenciales, es un mensaje de atención hacia estos lugares”, indicó.
En la actualidad, México cuenta con cinco Cardenales: Alberto Suárez Inda, José Francisco Robles Ortega, Norberto Rivera Carrera, Juan Sandoval Íñiguez (emérito) y Javier Lozano Barragán (emérito), por lo que el Arzobispo Carlos Aguiar, se convertirá en el sexto Cardenal mexicano.
Convoca a otro sínodo
Entre octubre y noviembre de 2017, se llevará a cabo un nuevo sínodo, que consiste en una reunión de representantes de la Iglesia en todo el mundo, básicamente Obispos, delegados de las distintas conferencias y representantes laicos, de los temas que se van a tratar.
En esta ocasión habrá de abordarse la Juventud y la Vocación, en donde tal como ocurre con los demás encuentros, acudirán peritos en el tema, en este caso: sociólogos, psicólogos y áreas que tienen que ver con el particular, además, estarán participando jóvenes y personal de la Pastoral Vocacional, y algunas otras personas que acudirán en calidad de oyentes, pero no tendrán voz ni voto, hecho que para la Iglesia Católica cobra gran relevancia.
“Tuvimos un sínodo y ahora resulta que convocan a otro; fue el de la familia, tuvimos reuniones extraordinarias de la familia y ahora convocan para hablar sobre la juventud y la vocación el próximo año. Esto es novedoso”, señaló el vocero de la Diócesis de Orizaba.