Alejandro Aguilar
El Buen Tono
córdoba.- Las familias cordobesas se reunieron para la tradicional misa de “inditos”. Siendo la Iglesia de “La Lupita” en La Estación el encuentro de la comunidad católica, el obispo Eduardo Carmona Ortega ofició la eucaristía y dio la bendición a los infantes que vistieron sus trajes de “indios” evocando la figura de Juan Diego.
La tradicional misa de “inditos” se celebró con gran entusiasmo y devoción en la Iglesia de “La Lupita” en La Estación, donde se reunieron numerosas familias cordobesas para rendir homenaje a la Virgen de Guadalupe y celebrar la figura de Juan Diego.
La eucaristía fue oficiada por el obispo Eduardo Carmona Ortega, quien también dio la bendición a los infantes que vestían sus trajes de “indios”, evocando la figura de Juan Diego, el humilde indígena que, según la tradición, fue testigo de la aparición de la Virgen de Guadalupe en el cerro del Tepeyac en 1531.
En la Iglesia de “La Lupita”, la misa de “inditos” se celebró con gran solemnidad y devoción.
Los infantes que vestían sus trajes de “indios” desfilaron por el altar, mientras que los feligreses cantaban y rezaban en honor a la Virgen de Guadalupe.
La misa de “inditos” es una tradición que se remonta a la época colonial, cuando los indígenas mexicanos celebraban la fiesta de la Virgen de Guadalupe con danzas y rituales además de las misas.
Con el tiempo, la tradición se extendió a otras partes del país y se adaptó a las costumbres y creencias de otras localidades.
El obispo Eduardo Carmona Ortega, en su homilía, destacó la importancia de la fe y la devoción en la vida de los creyentes.
También recordó la figura de Juan Diego, quien, a pesar de ser un humilde indígena, fue elegido por la Virgen de Guadalupe para ser su mensajero y testigo de su aparición.