Xalapa.- El gobierno del Estado, dejó de ser una “bolsa de trabajo” para familiares, amigos, compañeros de campaña, compañeros de Partido y simpatizantes del gobernador en turno. La basificación de miles de empleados aprobada este jueves, acabó con esta realidad. Todos los gobernadores hicieron lo mismo, lo mismo que ahora Miguel Ángel Yunes no podrá hacer: tomar posesión, y correr a miles de trabajadores para poner en su lugar a otros miles, pero de “su gente”. Ese fue el candado que dejó el actual gobierno de Veracruz con la aprobación que este jueves hiciera la mayoría priísta en la Legislatura del Estado.
Con todo y la amenaza del gobernador electo, de ventilar nombres, direcciones y teléfonos de los diputados que aprobaran el dictamen de basificación de varios miles de empleados de las dependencias del Ejecutivo, los diputados del PRI y del PVEM, con algunas excepciones, votaron a favor de la propuesta, que además eleva las percepciones de estos empleados hasta en un 37 por ciento.
Desde Boca del Río, el gobernador electo acusó que este jueves “se basificó la corrupción”, y aseguró que cumplirá su advertencia de buscar que los diputados que aprobaron este dictamen, sean repudiados por el pueblo veracruzano y juzgados política y penalmente por exponer al gobierno de Veracruz financieramente.
Desde el Congreso, el líder magisterial y de la Cámara, Nicolás Callejas, había llamado a Yunes Linares “Hitler”, y cuestionado su intención de ser “carcelero”, “fiscal”, y de ofender a la Cámara de Diputados y a su líder. Yunes le llamó, en dos ocasiones, “rémora”.
La confrontación mediática se dio de inmediato, y desde muy temprano, el recinto oficial de la diputación se llenó con cientos de empleados de distintas dependencias que observaron y escucharon el debate que no convenció a los priístas, y que enojó a los panistas y a los perredistas, mientras dos diputadas terminaron encadenándose en la tribuna más alta de Veracruz.
Pero la mayor controversia se da entre los propios empleados de gobierno, pues los que sí trabajan y no tienen base, ven que ésta es una oportunidad para que tengan los mismos derechos que los ya basificados. Pero nadie todavía sabe para quiénes serán las nuevas bases que, ahora, quedaron con un aumento de casi 40 por ciento. ESTADO, paG.. 07
