Nogales.- Momentos de pánico y terror vivieron habitantes de la colonia El Águila de Nogales al presenciar los disparos de arma de fuego que iniciaron elementos de la Secretaría de Seguridad Pública adscritos al Mando Único, en contra de jóvenes que se encontraban conviviendo en un antro ubicado en la avenida Juárez, así como de otros que caminaban por la calle Mártires de Chicago.
En las entradas de algunas viviendas se pudo observar que había grandes cantidades de sangre, la cual parece que fue de los jóvenes a quienes alcanzaron los impactos de arma de grueso calibre.
Específicamente en la calle Mártires de Chicago, justo atrás de autos de La Vega, los habitantes se percataron de charcos de sangre, impactos de bala en viviendas, postes, portones así como casquillos percutidos en distintas partes de la calle.
Según versiones de los habitantes, ellos se percataron de que un joven resultó severamente lesionado de bala, mientras que otro fue llevado en una de las camionetas del Mando Único.
Con relación a los hechos, fue ayer alrededor de las 04:00 horas cuando elementos del Mando Único llegaron al antro “Cheladas”, ubicado sobre la avenida Juárez en donde llevarían a cabo una revisión a los asistentes.
Ahí estacionaron las unidades oficiales de Seguridad Pública, pero de repente círculo un automóvil en donde viajaban jóvenes, los cuales circularon sin ningún problema e ingresaron a la calle Mártires de Chicago en la colonia El Águila.
Sin esperarlo, los estatales comenzaron a perseguir a los jóvenes quienes aparentemente entraron en temor porque desconocían el hecho de porqué les disparaban.
Lo anterior provocó tremendo miedo entre los habitantes de la zona, mismos quienes según comentaron que tuvieron que refugiarse hasta el fondo de sus casas para evitar que fueran alcanzados por las balas que se escuchaban a escasos metros.
Luego de varios minutos de impactos continuos, el personal del Mando Único se fue de la colonia y con ellos llevaban a un jovencito del cual se desconocen sus datos personales.
Trascendió que un muchacho resultó lesionado pero aparentemente como pudo llegó con sus familiares a pedir ayuda y ellos mismos los llevaron a un hospital particular.
Fue durante la mañana de ayer cuando los estatales regresaron a la zona para recoger los casquillos percutidos, mientras que los vecinos cubrieron los charcos de sangre con cal y tierra.
Mientras que alrededor del mediodía, los elementos del Mando Único llevaron a cabo revisiones de personas y vehículos en gasolinerías, colonias y calles de Nogales, sin que reportaran de algún aseguramiento o detención.
De la redacción
El Buen Tono