De la Redacción
El Buen Tono
Córdoba.- Ya en periodo de estiaje, Hidrosistema dispone del servicio de agua por tandeo para toda la ciudad, a pesar de que el calor sofoca a las familias.
Mientras Hidrosistema presume el uso de 10 pipas para “abastecer a toda la ciudad”, miles de familias viven entre la incertidumbre y la indignación.
“A veces llegan cada tres días, a veces nunca”, reclama María López, madre de dos hijos, mientras señala los botes vacíos frente a su casa en la colonia San José.
Su testimonio es el reflejo de un sistema colapsado, donde el agua no fluye por las tuberías, sino a través de parches institucionales.
En el último año, Hidrosistema realizó 2,667 viajes con pipas para repartir 32,230 metros cúbicos de agua, beneficiando, en teoría, a 161,150 personas. Sin embargo, estas cifras, lejos de ser un triunfo, exponen la profundidad de la crisis.
La dependencia de camiones cisterna no sólo evidencia el fracaso de la red de distribución, carcomida por 3,033 fugas y 39 tomas clandestinas en 14 meses, sino que perpetúa un servicio desigual.
Córdoba cuenta con 204,105 habitantes, y sólo 154,601 personas cuentan con tinacos, cisternas o aljibes; 49,470, casi el 25% de la población, almacenan agua en cubetas, tambos o improvisan con lo que tienen.
Además, las fugas siguen drenando no sólo agua, sino recursos públicos, mientras las tomas clandestinas, 39 en poco más de un año, reflejan un círculo vicioso de desesperación e ilegalidad.
