MÉXICO.- The Wall Street Journal, uno de los medios más influyentes entre los tomadores de decisiones en el mundo, dijo en un reportaje que la cancelación de los spots del Partido Acción Nacional (PAN) en los que critica a los “200 invitados” a la gira oficial a Inglaterra han reavivado las preocupaciones de que el Gobierno federal, del Revolucionario Institucional (PRI), esté coartando la libertad de expresión de partidos y los medios de comunicación.
“La autoridad electoral de México ha ordenado que los anuncios de televisión y radio de un partido político de la oposición, en donde acusan a Enrique Peña Nieto de malgastar dinero de los contribuyentes, sean sacados por difamar al Presidente, aumentando las preocupaciones sobre la capacidad de los partidos políticos para criticar al Gobierno”, dijo el influyente diario en una nota firmada por Amy Guthrie.
El Instituto Nacional Electoral, en un comunicado, señaló que los anuncios del PAN contenían “mensajes difamatorios” y dieron a las empresas de radio y televisión 24 horas para detenerlos. Los anuncios critican al Presidente por supuestamente llevar a unas 200 personas con él como parte de la delegación oficial mexicana durante una visita de Estado a Reino Unido. El Instituto dijo que Peña Nieto se quejó de los anuncios “por desacreditar y descalificar” al Ejecutivo sin ofrecer “ninguna prueba”.
The Wall Street Journal recuerda que Peña Nieto ha estado plagado, en los últimos meses, de acusaciones de conflicto de intereses y corrupción, después de las revelaciones de que su mansión familiar fue construida y el título estaba en manos de una empresa constructora mexicana cuyo propietario ha ganado grandes contratos gubernamentales, aunque el Presidente Enrique Peña Nieto ha negado las acusaciones.
También recuerda el caso de Carmen Aristegui, quien detonó la noticia de la mansión y fue despedida en marzo por Noticias MVS.
The Wall Street Journal dice que durante la visita de marzo, “el periódico más influyente de México, Reforma, informó que la delegación mexicana ascendió a unas 200 personas, entre ellas miembros del gabinete, políticos, empresarios y académicos. Se dijo que la delegación era mucho más grande que las visitas de Estado mexicano anteriores”.
Un portavoz del Presidente, contactado por el diario vía teléfono, declinó hacer comentarios alguno.