La canción infantil “Baby Shark” alcanzó 7.040 millones de reproducciones y se convirtió en el video de YouTube más visto de la historia.
Se subió por primera vez a la plataforma hace más de cuatro años y se convirtió en un fenómeno mundial. El tema fue grabado por la cantante coreano-estadounidense Hope Segoine cuando tenía 10 años.
El video, que contiene bailes de niños en una piscina animada llena de tiburones, fue producido por la compañía educativa surcoreana Pinkfong y primero se hizo viral en Asia, y luego en EU y Europa. Alcanzó el número 6 en la lista de sencillos del Reino Unido y el número 32 en EU Ahora acaba adelantar al viejo líder mundial en YouTube, “Despacito”, sencillo del 2017 de las estrellas puertorriqueñas Luis Fonsi y Daddy Yankee.