- Exigen reformar Código Hacendario
- Para poner un puesto de antojitos es una calamidad por la alta carga recaudatoria
- Ciudadanos manifestaron que hay una “política de terror” recaudatoria
ORIZABA.- En Orizaba es una pesadilla poner un puesto de venta de antojitos por la política de alta carga recaudatoria y esta problemática se presenta en otros rubros, como es en los permisos de construcción. Ante ello exigen que se reforme el Código Hacendario del municipio, que es el arma principal de los nuevos hacendados municipales, señalaron ciudadanos que integran un frente que busca terminar con los 12 años de secuestro de la administración por un grupo empresarial.
En rueda de prensa, Miguel Rodríguez, Enrique Alcántara, Jovita Velázquez, Gabriela Calva, Eduardo Zárate y Manuel Ojeda, José Francisco Aguilar manifestaron que “la política de terror recaudatoria llevada a cabo por la administraciones municipales, en los últimos doce años, es de tal magnitud, que a la par de mostrar una insensibilidad social es atentatoria de los derechos humanos de una vivienda digna”.
“También al disfrute del derecho al agua, al divertimento, al trabajo, entre otros derechos que se violentan todos los días por los llamados inspectores municipales, que consideran que un lote donde detectan dos medidores de luz, o que hay dos puertas de acceso, deben de pagar el doble por ser dos familias, a pesar de que se les demuestra que son una sola familia”.
“Orizabeños vivimos los efectos de la visión neoliberal, donde todo debe de ser pagado y que todo lo público debe de ser privatizado y sujeto a verse como negocio. Pareciera que se busca que las familias orizabeñas de ascendencia popular, obrera o campesina no deben de construir, no deben de disfrutar de su vivienda, no deben de trabajar por su cuenta, no deben de ser personas libres”.