Un avión de carga de DHL, operado por Swiftair, sufrió un trágico accidente este lunes por la mañana mientras se aproximaba al aeropuerto de Vilna, en Lituania. La aeronave, un Boeing 737 con 31 años de antigüedad, se estrelló en una zona residencial tras deslizarse hacia una casa, dejando un saldo de un tripulante español fallecido y tres heridos de diversas nacionalidades. Afortunadamente, no hubo víctimas entre los residentes de la zona.
Un aterrizaje forzoso y un misterio en el aire
Según datos preliminares, el accidente ocurrió alrededor de las 5:30 am, bajo condiciones climáticas adversas, con temperaturas cercanas al punto de congelación y vientos de 30 km/h. Las imágenes de vigilancia mostraron al avión descendiendo de manera aparentemente normal antes de explotar en una enorme bola de fuego al impactar en tierra.
Aunque las autoridades locales han descartado factores externos evidentes, las investigaciones aún están en curso. El Ministro de Defensa de Lituania, Laurynas Kasčiūnas, destacó que “definitivamente no hubo factores externos que dañaran el avión,” pero será necesario analizar la caja negra y entrevistar a los sobrevivientes para obtener más claridad sobre lo ocurrido.
¿Sabotaje o accidente?
En medio de la incertidumbre, los funcionarios lituanos no han descartado la posibilidad de sabotaje. La Inteligencia Nacional del país considera plausible la hipótesis de un acto terrorista, señalando patrones recientes que apuntan a la presunta implicación de Rusia en incidentes similares como represalia contra naciones que apoyan a Ucrania. Sin embargo, hasta ahora no se han encontrado pruebas concluyentes que relacionen este caso con esas actividades.
Reacciones y próximos pasos
El Departamento de Bomberos y Rescate logró evacuar a los residentes cercanos a la zona del impacto, evitando pérdidas humanas adicionales. La Primera Ministra de Lituania, Ingrida Šimonytė, ha pedido paciencia mientras las investigaciones se desarrollan. “Es fundamental no especular y permitir que las autoridades hagan su trabajo de manera exhaustiva y profesional,” declaró.
El Ministerio de Transporte alemán ha enviado expertos del Buró Federal de Investigación de Accidentes Aéreos para colaborar con las investigaciones, que incluirán un análisis completo del fuselaje, los datos de vuelo y las condiciones meteorológicas.
Una luz en medio de la tragedia
A pesar de la magnitud del accidente, los daños en tierra fueron limitados, y las familias locales lograron ser puestas a salvo. Mientras tanto, el trágico suceso ha despertado preocupación internacional sobre la seguridad en el transporte de carga y los riesgos asociados en el contexto actual.
Este incidente subraya la importancia de reforzar las medidas de seguridad en la aviación y de investigar a fondo los factores que pudieron contribuir a esta tragedia que conmociona a Lituania y al mundo.