de la redacción
El Buen Tono
tomatlán.- El descontento ciudadano crece ante las reiteradas denuncias de opacidad y vicios en los gastos corrientes del ayuntamiento que preside Antonio Flores.
Lo que debería ser un ejercicio transparente de administración pública se convirtió, según pobladores y críticos, en un manejo discrecional de los recursos municipales que prioriza intereses personales sobre las necesidades colectivas que existen.
El presupuesto para obras públicas, programas sociales, y servicios básicos, registra dudas por su falta de claridad.
En sesiones de cabildo, ediles opositores solicitaron informes detallados sobre los egresos, encontrando evasivas y respuestas incompletas.
Esta situación provocó sospechas sobre el destino de los recursos públicos, mientras las comunidades sufren el abandono de sus demandas más urgentes.
Calles en mal estado, luminarias sin funcionar, y servicios básicos deficientes son el día a día de los habitantes de Tomatlán, aseguraron.