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Quintana Roo, México – Con la inminente entrada del huracán Beryl a la Península de Yucatán, tanto las autoridades federales como estatales han activado una serie de planes de contingencia destinados a atender y auxiliar a la población que podría verse afectada. Uno de los primeros pasos en esta estrategia ha sido la implementación de un programa de evacuación en las zonas cercanas a las costas, buscando garantizar la seguridad de los residentes.
De acuerdo con los expertos en meteorología, se espera que el ciclón toque tierras mexicanas la noche del jueves 4 de julio o durante la madrugada del viernes 5. Ante esta previsión, las autoridades están trabajando contra el reloj para evacuar a los habitantes de las áreas más vulnerables y ponerlos a salvo antes de que el huracán llegue a la región.
La gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama, ha sido una figura clave en la coordinación de estos esfuerzos. En una reciente conferencia de prensa, Lezama destacó las zonas prioritarias de atención, señalando que las comunidades costeras son las que enfrentan el mayor riesgo. “Estamos tomando todas las medidas necesarias para proteger a nuestra población. Hago un llamado a todos los residentes en áreas de riesgo a seguir las indicaciones de las autoridades y evacuar de manera ordenada”, declaró la gobernadora.
El programa de evacuación incluye el desplazamiento de residentes a refugios temporales preparados para recibir a las familias, proporcionando alimentos, agua y asistencia médica. Además, las fuerzas de seguridad y protección civil están en alerta máxima, listas para responder a cualquier emergencia que pueda surgir durante el paso del huracán.
La población ha sido instada a mantenerse informada a través de los canales oficiales y a no hacer caso a rumores o información no verificada. Las autoridades reiteran su compromiso de trabajar incansablemente para salvaguardar la vida y el bienestar de todos los habitantes de la región afectada.
