Este martes, un trágico accidente en las cercanías de Managua dejó al menos dos personas muertas y ocho heridas, incluyendo una en estado reservado y dos en estado crítico. El incidente ocurrió a unos 19 kilómetros al sur de la capital nicaragüense, cuando un autobús de pasajeros, que transportaba a 70 viajeros, perdió los frenos y arrolló a varias motocicletas y un vehículo sedan antes de impactar contra una vivienda que alberga un taller de vulcanización.
Según el informe de la Policía Nacional, el autobús sufrió fallas mecánicas en su sistema de frenos. El impacto inicial fue contra dos motocicletas y una mototaxi, lo que provocó una cadena de colisiones. El choque culminó cuando el vehículo se estrelló contra la propiedad, causando un desastre considerable en la zona.
Aunque inicialmente se reportaron seis muertes y doce heridos, la cifra fue ajustada más tarde, generando confusión entre los medios de comunicación. Entre los fallecidos se encuentra un subinspector de la Policía de 48 años, quien se encontraba en su motocicleta, así como una mujer de 32 años que era pasajera en un auto particular.
La emisora La Primerísima y el Canal 4, ambos de orientación sandinista, informaron sobre el accidente citando fuentes policiales. Las autoridades explicaron que el lugar del accidente es conocido por sus pendientes y curvas, lo que contribuyó a que el autobús alcanzara una velocidad peligrosa antes del impacto.
Testigos del suceso señalaron que el autobús iba a gran velocidad en el momento del accidente, lo que llevó a la detención del conductor para su interrogatorio. La grabación de las cámaras de seguridad en la zona ha sido clave para la investigación, mientras la Policía Nacional continúa evaluando las circunstancias del trágico suceso.
Este accidente resalta la necesidad urgente de mejorar las condiciones de seguridad en las carreteras y garantizar que los vehículos de transporte público estén en condiciones óptimas para operar, con el fin de evitar tragedias como esta en el futuro.