Orizaba.- El coordinador estatal de Maestros por México, Omar Hernández Dolores, manifestó que el magisterio está pasando por uno de los peores momentos, pues tal parece que salir a trabajar “es como jugar a la ruleta rusa” a tal grado que se estima que en la Entidad se han registrado entre 120 y 140 casos de secuestro, de los cuales en la región serían alrededor de 45; sin embargo, el 90 por ciento no se denuncian por temor.
Luego de que se dieran a conocer los dos casos de secuestro que se registraron la mañana de ayer jueves, el entrevistado consideró que es momento de “alzar la voz, ya se han suspendido clases y se han realizado infinidad de acciones, pero hay oídos sordos de parte de las autoridades”.
Dijo que es lamentable observar a un Gobierno que no reacciona, “se la pasa echándole las culpas al Fiscal a otros actores sociales y políticos, pero lo que la ciudadanía nos estamos jugando es la vida, ya ganaron, ya son gobierno, que se olviden que andan en campaña, nosotros exigimos que se pongan a trabajar (…) fue en pleno día, ya no hay garantías ni para ti, ni para mí, ni para el ciudadano común, es jugarte la ‘ruleta rusa’ todos los días saliendo, porque no sabes si vas a regresar”.
Indicó que falsamente se cree que el maestro está económicamente bien, pero se desconoce que el cinco por ciento de los maestros gana exageradamente bien, mientras que el 90 por ciento gana por debajo del salario de los profesionistas “y eso ha ocasionado una persecución hacia los maestros”.
Explicó que las estadísticas que dan las autoridades son con base en las denuncias, pero el 90 por ciento no lo hace por temor, por lo que los datos que tiene el Gobierno Estatal o el Federal no son apegados a la realidad y “en algunos de los casos no se sabe su paradero. como es el caso de Ixtaczoquitlán y de Zongolica, que hasta el momento no sabemos el paradero de los compañeros, en algunos casos se pagó el rescate y en otros no se logró”.
Dijo que hasta hace poco se considera como “foco rojo” todo el corredor desde Acultzingo hasta Ixtaczoquitlán, porque no se habían dado casos en La Perla, Mariano Escobedo y Atzacan.