Córdoba.- Un niño de 11 años resultó lesionado la tarde de ayer, al ser atropellado por un taxi, cuando cruzaba el bulevar San Lorenzo, a la altura de la calle Azucena, de la entrada a la unidad habitacional Córdoba-2000, donde fue rescatado por paramédicos y trasladado a un hospital, donde quedó internado.
Vecinos del lugar acudieron a ayudar al menor, a quien recostaron en una jardinera, mientras que el conductor del taxi permaneció en el sitio, hasta que arribaron los servicios de emergencia y peritos de la delegación de Tránsito del Estado.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 17:00 horas de ayer, cuando el menor Ricardo Daniel Juárez López, de 11 años, regresaba de la tienda hacia su casa ubicada sobre el mencionado bulevar, de la unidad habitacional San Román.
El menor intentó atravesar el bulevar, pero cuando iba a mitad del camino, se percató que se aproximaba un taxi, el cual circulaba del Pueblito hacia La Luz Francisco I. Madero, y debido a que el niño se detuvo para regresarse hacia el camellón, fue alcanzado por el coche, mismo que lo impactó con el ángulo delantero derecho y lo proyectó hacia el suelo, resultando con golpes en la cabeza y el cuerpo.
El vehículo causante del accidente es un automóvil marca Nissan-Tsuru, con número de placas 1043-XDA, taxi de Córdoba número económico 285, el cual era manejado por Pedro Flores Hernández, con domicilio en la calle 28, del fraccionamiento Valle del Sol.
Vecinos del lugar corrieron a ayudar al niño y lo recostaron sobre el área verde del camellón, solicitando el auxilio de las corporaciones de emergencia, por lo que momentos después arribaron paramédicos de la Cruz Roja, así como peritos de Tránsito del Estado.
Una vez que el menor fue atendido e inmovilizado, fue trasladado a un sanatorio particular de la avenida 7, entre calles 16 y 18, para su valoración médica, en tanto los peritos intervinieron al taxis, quien manifestó que “yo venía del Pueblito, y al llegar aquí, el niño se atravesó sin fijarse, y ya no me pude parar”.
Decenas de vecinos se concentraron en el lugar del accidente, donde el taxista permaneció y sólo se retiró del lugar por unos momentos, para hablar por teléfono y pedir ayuda, así como para contactar a un representante de la compañía aseguradora del taxi, “me retiré para hablar por teléfono, e incluso les dije a los familiares que me acompañaran, nunca traté de escaparme”, dijo el ruletero a los familiares y vecinos del niño, mientras trataba de reponerse del nerviosismo que experimentó.
Mayra Isabel López, tía del niño, explicó que su sobrino había ido a la tienda y regresaba a su casa, cuando fue atropellado por el taxi. Además aseguró que el menor estaba al cuidado de su madre, pero ésta no se encontraba en el lugar del accidente.
Antonio Osorio
El Buen Tono
