AGENCIA
EEUU.- Los astronautas Barry Wilmore y Sunita Williams hablaron por primera vez tras su regreso de una misión espacial que se extendió nueve meses, en lugar de los ocho días originalmente previstos. En una entrevista con Fox News, explicaron los motivos del retraso, reconocieron fallas en la misión y respondieron a las declaraciones del expresidente Donald Trump sobre su supuesto abandono en el espacio.
Wilmore, comandante del vuelo de prueba de la nave Starliner de Boeing, reconoció que la misión no salió como se planeó y asumió parte de la responsabilidad:
*“Hay cosas que no pregunté y que debí haber preguntado. No sabía en ese momento que necesitaba hacerlo, pero en retrospectiva, algunas señales estaban ahí.”
El astronauta también señaló que tanto Boeing como la NASA cometieron errores en la preparación y pruebas previas al lanzamiento.
La misión comenzó el 5 de junio, cuando Wilmore y Williams despegaron a bordo de la Starliner con destino a la Estación Espacial Internacional (ISS). Su regreso estaba programado para solo ocho días después, pero problemas técnicos los obligaron a permanecer en el espacio por 288 días, hasta su regreso el 18 de marzo.
“Mi primer pensamiento fue que teníamos que adaptarnos”, recordó Williams. “Si nuestro destino era quedarnos hasta febrero, pues hagamos lo mejor de la situación”.
Wilmore admitió que lo más difícil fue la separación de su familia:
“Pensé en que no estaría en el último año de escuela de mi hija. Pero lo acepté, porque esto no es sobre mí, sino sobre el programa de vuelos espaciales tripulados de la NASA”.
Trump y su asesor Elon Musk acusaron al gobierno de Joe Biden de haber “abandonado” a los astronautas en la ISS. Sin embargo, ambos tripulantes rechazaron esta versión.
“No nos sentimos abandonados en ningún momento. No pudimos regresar como lo planeamos, pero estábamos preparados y entrenados para esto”.
A pesar de ello, Wilmore sorprendió al afirmar:
“No tengo razones para no creer en lo que dice Trump, porque han ganado mi confianza. Y por eso estoy agradecido”.
En los últimos meses, Trump y Musk han asegurado que intervinieron para acelerar el regreso de la tripulación. La NASA reconoció que la administración del expresidente influyó en el proceso, y su portavoz Bethany Stevens declaró que:
*“Sin la intervención del presidente Trump, el regreso de los astronautas no habría sucedido.”
Sin embargo, la agencia espacial insistió en que la seguridad de la tripulación fue la prioridad en la toma de decisiones y no razones políticas.
A pesar de las complicaciones, Wilmore y Williams aseguraron que confían en la tecnología de Starliner y en el futuro del programa espacial tripulado de la NASA.
