
Juan López
El Buen Tono
Fortín.- El director de Desarrollo Económico, Ernesto Arteaga Quevedo, se enriquece con los ingresos que obtiene del comercio ambulante cada miércoles desde hace tres años y cuatro meses, le permiten jugar al comunicador, y ausentarse de sus funciones para dedicarse a hacer campaña y operar una página afín a la Cuarta Transformación y su política.
El funcionario asiste a eventos proselitistas en horario laboral, como el registro de Concepción Guillermina Méndez López, en Amatlán, y de Manuel Alonso Cerezo en Córdoba. Todo esto con la protección del presidente municipal, Gerardo Rosales Victoria, quien le permite dejar de lado sus funciones para atender otros intereses.
Arteaga Quevedo, en lugar de cumplir con sus responsabilidades en el ayuntamiento, utiliza los recursos públicos para posicionarse políticamente.
Mientras el comercio informal crece sin control, él se enfoca en su nueva faceta de “comunicador”, financiando su proyecto con lo que obtiene de los ambulantes a los que permite invadir las calles, a pesar del riesgo que significa.
Hace unos meses, El Buen Tono pidió, mediante una solicitud de acceso a la información, conocer su salario y su perfil profesional; sin embargo, el alcalde ordenó ocultar los datos, negando transparencia sobre el manejo de los recursos públicos.
La protección que le brinda Rosales Victoria a Arteaga Quevedo confirma que la administración municipal tolera la corrupción, la encubre, a pesar de que afecte a los ciudadanos de Fortín.
Ciudadanos manifestaron su inconformidad al respecto, y pidieron sanciones.
