AGENCIA
Sunny Isles Beach, Florida.- El martes pasado, una mujer de Sunny Isles Beach, Florida, identificada como Yulia Storozhuk, de 29 años, fue arrestada por dos cargos de abuso infantil después de que una cámara de seguridad mostrara un acto de brutalidad contra su hijo de 3 años.
El presunto incidente tuvo lugar en un edificio de condominios en 17000 N. Bay Road. Las imágenes de la cámara, captadas por un vecino, muestran a Storozhuk agarrando a su hijo, levantándolo del suelo y arrojándolo al suelo alrededor de las 21:00 horas del lunes. En el video, se puede ver a la madre pateando brutalmente al niño en varias ocasiones.
Un segundo video, grabado aproximadamente 40 minutos después, muestra a Storozhuk empujando al niño en el pecho, haciendo que caiga hacia atrás y golpee el suelo.
Después de su detención, se encontraron signos de abuso en el niño, incluyendo enrojecimiento en la mejilla y la frente, hematomas en el antebrazo derecho y la rodilla izquierda, así como rasguños en el estómago y la espalda.
Storozhuk, quien trabaja como empleada ucraniana en un superyate, atribuyó el estallido violento a que su hijo no la escuchaba y admitió que “dejó que sus emociones se apoderaran de ella”. Añadió que es madre soltera y que lamenta profundamente lo sucedido.
El sargento Melissa Porro de Sunny Isles Beach expresó su indignación por el incidente, diciendo: “Esto es algo que, ya seas padre o no, es puro disgusto. Que un ser humano, y mucho menos la madre de este niño, le haga algo como esto a un niño inocente que no puede defenderse, lo encuentro totalmente despreciable.”
Este caso ha generado preocupaciones sobre el impacto psicológico que el abuso puede tener en el niño. La psicóloga clínica Maribel Del Rio-Roberts sugirió que, en situaciones de estrés, los padres deben buscar apoyo y ayuda externa en lugar de recurrir a la violencia.
Yulia Storozhuk fue liberada de la cárcel y se le ordenó mantenerse alejada de su hijo. Será procesada en 30 días. En una publicación de cumpleaños para su hijo dos años antes del incidente, Storozhuk lo llamó su “ángel” y su “esperanza, protector y orgullo”.