Córdoba.- Techos de casas tirados, ramas de árboles caídos, lonas y cables reventados, sin contar una torre a punto de desplomarse, fue el saldo que dejó la tormenta de ayer en la ciudad de Córdoba.
Luis Alfredo Chávez Ochoa, auxiliar de Protección Civil Regional, informó que en los municipios de Yanga, Cuitláhuac, Fortín, Atoyac, así como en Córdoba, se reportó saldo blanco al final de la tormenta, sólo daños materiales en infraestructura pública como semáforos, cables de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y Teléfonos de México (Telmex).
Indicó que el fenómeno que afectó en la región fue una tormenta eléctrica acompañada de granizo, en la que los vientos alcanzaron una velocidad de 40 kilómetros por hora.
“Únicamente hubo encharcamientos por las alcantarillas tapadas debido al exceso de basura, pero no hubo desborde de ríos, ni inundaciones importantes en la zona”, expresó Chávez Ochoa.
Después de media hora de la intensa lluvia y granizo, el cielo lució despejado sin registrarse más precipitaciones en la región.
Tras un recorrido realizado en el municipio de Córdoba, EL BUEN TONO detectó la caída de un semáforo en la avenida 7 y calle 2, asimismo en la colonia Los Cerezos y en Toxpan se registró la caída de árboles encima de cables de luz .
En las afueras del Beisborama se reportó afectaciones en una de las torres de luz, casi toda la ciudad fue afectada por la tormenta, dejando a su paso fallas en energía eléctrica, caídas de árboles y láminas.
