Las autoridades de Arizona están intensificando su investigación sobre un alarmante aumento en las muertes relacionadas con el calor en el condado de Maricopa, uno de los más poblados de Estados Unidos. Hasta la semana del 13 de julio, se han registrado 322 muertes que podrían estar vinculadas con las extremas temperaturas de este año, una cifra que ha impulsado a los funcionarios a solicitar que se declare el calor como un ‘desastre mayor’.
En lo que va del año, se han confirmado 23 muertes directas debido al calor en Maricopa, un número que es casi el doble de las registradas en el mismo periodo del año anterior. De estas muertes confirmadas, 17 se atribuyen directamente al calor, mientras que en 6 casos el calor fue un factor contribuyente.
Los datos revelan que casi el 40 % de las víctimas eran personas sin hogar, subrayando la grave vulnerabilidad de esta población durante las olas de calor extremo. Las recientes temperaturas han sido devastadoras, con Phoenix alcanzando casi 48 grados Celsius el 5 de julio.
La situación ha llevado a Kris Mayes, fiscal de Arizona, a renovar su llamado a la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) para que reconozca el calor extremo como una emergencia de desastre mayor. Hasta la fecha, NBC News reporta que se han registrado 73 muertes relacionadas con el calor en todo Estados Unidos en 2024.
Mientras Arizona enfrenta este desafío sin precedentes, la solicitud de ayuda federal podría ser crucial para mitigar los efectos devastadores de las altas temperaturas y proteger a las comunidades más vulnerables.
