Londres.- Tras años de debate y divisiones internas, la Iglesia de Inglaterra dio ayer un paso histórico al aprobar formalmente la ordenación de mujeres al puesto de obispo, con los primeros nombramientos previstos en 2015.
En un acto cargado de simbolismo en la Casa de la Iglesia en Londres, sede de la fe anglicana, el sínodo general, máximo órgano de Gobierno, aprobó por mayoría simple adoptar la nueva legislación que cambiará para siempre este credo.
Al término de la breve votación, a mano alzada y con sólo un puñado de opositores, el primado de la Iglesia anglicana, Justin Welby, arzobispo de Canterbury, destacó el punto de inflexión que significa este momento.
“Hoy podemos empezar a aceptar una nueva manera de ser de la Iglesia y de avanzar hacia adelante juntos” , declaró.
Los miembros del sínodo aprobaron concretamente la enmienda del canon 33 de la ley eclesiástica, para que incluya que “un hombre o una mujer pueden ser consagrados al oficio de obispo”.
La votación, que duró unos minutos, culminó el proceso iniciado el pasado julio, cuando el sínodo, entonces reunido en York (norte de Inglaterra), dio luz verde al principio de la ordenación de mujeres al obispado.
Tras esa aprobación, el Comité eclesiástico del Parlamento y las dos Cámaras de éste -los Comunes y los Lores- tramitaron la legislación correspondiente, que hoy se traspuso a la ley canónica con esta
sanción final.
Cabe recalcar que han pasado veinte años desde que se ordenara a las primeras mujeres sacerdote en Inglaterra, en 1994; ahora la puerta está abierta para que sean consagradas obispas.
Tomado de ExcÉlsior