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Córdoba.- Las familias que se encuentran en alto grado de vulnerabilidad buscan ayuda del Gobierno Federal y estatal, a fin de resolver su situación, pero un gran número de personas se niegan a trabajar porque reciben subsidio oficial.
Activistas de la zona indicaron lo anterior y añadieron que en las comunidades rurales y en las administraciones pasadas, se exigía a los padres de familia llevar a sus hijos a la escuela toda la semana, “si tenían tres faltas, perdían el apoyo económico, entonces los menores asistían a sus clases, con la Cuarta Transformación ese requerimiento se perdió, ahora pueden hacer con el dinero lo que quieran sin dar explicaciones”.
Mencionaron que lo anterior genera ausentismo en las escuelas, “les dan sus becas y pueden comprar cerveza y no pasa nada”.
Consideraron que esos programas son para ganar votos, “aunque el dinero provenga de las personas que trabajan y pagan impuestos por todo lo que hacen”.
Apuntaron que en comunidades pobres las personas piden a la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), comida, colchones, tanques de gas, hornillas, entre otros, “solicitan de todo, saben que pueden lograr esos enseres sin el menor esfuerzo”.
Añadieron que el reclamo es de jóvenes, adultos, discapacitados, enfermos y jefas o jefes de familia.
“Ahí se destinan varios millones de pesos y es algo que ocurre en todo el estado”, expresaron las fuentes.