ORIZABA.- Hoy, en el Día Mundial de la Hepatitis, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) destacó la importancia de su prevención. El hígado es un órgano que se sitúa en la parte posterior derecha de la cavidad abdominal, debajo del diafragma y por encima del estómago, el riñón derecho y los intestinos, su tonalidad es marrón rojizo oscuro y tiene forma de cono y al igual que el resto de los que componen el cuerpo humano, es susceptible a diversos padecimientos cuando no se tienen hábitos de vida saludables, entre ellos la hepatitis.
Cirrosis hepática y cáncer son los principales padecimientos que pueden derivarse, por lo que es muy importante atenderse oportunamente en caso de desarrollarla. La persona que ha presentado alguno de los tipos de hepatitis está limitada para donar sangre.
El coordinador de Salud Pública en la Delegación Veracruz Sur, Baldomero Vargas Brito, detalló que la clasificación principal de la hepatitis es: A, B, C, D y E; generalmente se adquieren a través del consumo de agua y alimentos contaminados, hasta la transmisión por fluidos corporales ya sea por contacto sexual, intercambio de agujas, durante el parto, elaboración de tatuajes y colocación de piercing en lugares con deficiente higiene.
Reconoció que son pocos síntomas o en ocasiones inexistentes, sin embargo, se caracteriza por la ictericia (coloración amarillenta de la piel y los ojos), orina oscura, fatiga intensa, náuseas, vómitos y dolor abdominal.
Explicó que la hepatitis A se encuentra en las heces de personas contagiadas y casi siempre se transmite por el consumo de agua o alimentos contaminados, por lo que se insiste en el lavado de manos concienzudo y la desinfección de los alimentos, tomar agua clorada, desinfectada o purificada para garantizar la inmediata eliminación del virus.
En el caso del tipo B, la transmisión ocurre por la exposición a sangre, semen y otros líquidos corporales infecciosos, también puede transmitirse de la madre infectada al bebé al nacer, por compartir jeringas contaminadas; para este tipo existe una vacuna segura y eficaz para prevenir esta infección.
Dijo que la C se transmite por exposición a sangre contaminada, la transmisión sexual también es posible, y a diferencia de la tipo B, para esta no hay vacuna contra la infección. La E al igual que la A se transmite por el consumo de agua o alimentos contaminados.
Por último, Vargas Brito reiteró la importancia de la prevención y la adopción de estilos de vida adecuados para prevenir éste y otros padecimientos, así como el acudir a cualquier Unidad de Medicina Familiar del IMSS, ante cualquier síntoma o malestar.
