AGENCIA
EEUU.- El expresidente Alejandro Toledo, acusado por Lima de corrupción y lavado de dinero, se entregó a la Justicia estadounidense para iniciar su proceso de extradición a Perú, informaron las autoridades en California.
Toledo, de 77 años, se entregó ayer a las 09:15 horas locales (10:15, tiempo de Ciudad de México) a un tribunal federal de San José y quedó a disposición del servicio de alguaciles de Estados Unidos.
El político, que gobernó Perú de 2001 a 2006, salió de su residencia en Menlo Park acompañado de su abogada y su esposa, Eliane Karp. Vestía una chaqueta verde, chaleco rojo, blue jean y zapatos deportivos, y llevaba algunas pocas pertenencias, según se vio en imágenes divulgadas en redes sociales.
Una amplia comitiva de medios aguardaba desde temprano en la entrada del edificio federal Robert F. Peckham, a donde debía entregarse, sin embargo, Toledo los evadió e ingresó discretamente por otro lugar.
Se espera que el proceso de extradición sea ejecutado en menos de una semana, le explicaron fuentes del sistema judicial.
El expresidente permanecerá “en una cárcel adecuada” hasta que sea confiado a las autoridades peruanas, detalló en un fallo esta semana el juez Thomas Hixson, del distrito norte de California, quien ordenó al político entregarse sin más dilaciones este viernes.
Perú lo acusa de haber recibido millones de dólares de la constructora brasileña Odebrecht a cambio de licitaciones para obras públicas. Los fiscales piden 20 años y 6 meses de cárcel.
Toledo, acusado en Lima en el marco del caso Odebrecht, ha negado siempre los señalamientos y presentó varias peticiones para bloquear la extradición que Perú buscaba desde 2018 y que Estados Unidos autorizó en febrero.
El miércoles de esta semana pidió atrasar la entrega cuatro días por compromisos médicos, algo que el juez Hixson rechazó, y el jueves introdujo una moción de emergencia en una corte de Washington para que se reconsiderase su caso.