De la Redacción
EL BUEN TONO
Coetzala.- Para extraer documentos de la Tesorería y recuperar el palacio municipal, el alcalde, Alejandro García Hernández, llegó ayer al lugar con un grupo de choque, y golpeó a los ciudadanos que tenían bloqueado el edificio desde el 12 de febrero de este año.
Testigos informaron que el funcionario irrumpió en el inmueble, agredió a sus detractores, logró su objetivo, obtuvo los documentos que necesitaba e ingresó a sus oficinas sin que nadie interviniera para frenarlo, “eso se llama corrupción e impunidad”.
Su actuación provocó indignación de la población porque rechaza el diálogo, actúa arbitrariamente.
El conflicto, refirieron afectados, se enmarca en una prolongada crisis política que mantiene desde hace siete meses cerrado el edificio del gobierno local.
Indicaron que el funcionario convocó ayer por la mañana a una asamblea informativa, donde discutirían el tema de obras públicas; sin embargo, quienes llegaron observaron al mandatario de Morena arribar con un grupo de choque.
Agredieron a los asistentes, mientras García Hernández ingresaba al edificio de manera arbitraria, a fin de llevarse los expedientes que requería.
Pese a la presencia inicial de la Policía Estatal y de la Fuerza Civil, se retiraron del lugar y dejaron solos a los manifestantes, quienes aseguraron que los elementos están coludidos con las autoridades, por eso se negaron a intervenir.
Corrupción
La protesta es porque los habitantes quieren que salgan de la nómina municipal empleado foráneos, que acuden dos veces por semana a laborar, así como “aviadores”.
En los dos casos, indicaron, se trata de favores que debe el edil o compromisos que, además, impiden que los residentes tengan oportunidad de laborar y obtener un salario justo para sus gastos.
Aseguraron que a los empleados de Coetzala les descuentan por trabajar, pues deben cooperar para las fiestas patronales, y terminar las obras que dejan inconclusas las constructoras coludidas con el edil.
Denunciaron que el Órgano de Fiscalización Superior (Orfis), se mantiene sin sancionar al funcionario porque seguramente les da moches.
