Efraín Hernández
El Buen Tono
Fortín.- Sin los permisos correspondientes, el alcalde, Gerardo Rosales Victoria, comenzó a construir una barda en el terreno del que se apropió en el camino a Casas Geo, frente al fraccionamiento Ánimas.
Vecinos indicaron que el edil actúa con impunidad debido al cargo que ostenta.
Para llevar a cabo la obra, contrató a obreros de Chocamán, lo que provocó una nueva “ola” de críticas contra Rosales Victoria, y su administración.
En un recorrido que se realizó ayer por el lugar, se corroboró que en el predio labora personal de una constructora, quienes negaron vínculos con el Ayuntamiento.
Al preguntarles sobre las licencias de construcción, dijeron que carecían de ellas.
Lo anterior corrobora las acusaciones de que el funcionario, coludido con su director de Obras Públicas, Enrique Gaspar Falcón, actúan fuera de la legalidad.
Además, las condiciones en las que laboran los trabajadores son precarias, están sin equipo de seguridad básico, como cascos o protectores para los ojos, lo que pone en evidencia la negligencia de la constructora, pero también la omisión de las autoridades municipales, lo que también es corrupción.
El silencio del presidente municipal ante las denuncias incrementó el malestar entre los ciudadanos, quienes lo acusan de actuar con impunidad, minando aún más la confianza en su gestión municipal.
La falta de permisos, las condiciones precarias de trabajo, y el uso injustificado de mano de obra externa. son algunos de las circunstancias que dejan al descubierto el manejo turbio que caracteriza a la presente administración, que emana de la Cuarta Transformación, y que gobierna Fortín.
