Córdoba.- Sin importar la seguridad de los albañiles que trabajan arduamente en la reconstrucción del mercado Revolución, se pueden notar las condiciones en las que trabajan y que lo más alarmante; es la poca o nada seguridad con la que cuentan.
Diariamente a pasos acelerados y a marchas forzadas, los albañiles se dedican a laborar en la construcción sin ninguna medida de seguridad, por lo que se visualiza una situación alarmante.
Subiendo y bajando por esos techos desgajados y que prácticamente están por derrumbarse, los trabajadores dedicados a su vocación y sin ninguna preocupación más que terminar con la labor, se mantienen firmes en su trabajo ya que su motivación es el salario.
Adultos, jóvenes y padres de familia, todos y cada uno de ellos trabajando hombro con hombro para concluir con su jornada y así poder llevar el pan a casa sin importar los riesgos que su trabajo conlleve.
Entre escombros y andamios peligrosos al puro estilo de los esclavos egipcios, los trabajadores llevan en sus espaldas, bultos, ladrillos y cemento, olvidando el pánico a las alturas.
MARTHA MUÑOZ ASCENCIO
EL BUEN TONO