De la Redacción
el buen tono
Región.- En medio de un creciente descontento ciudadano, surgen críticas contundentes hacia los gobiernos de Morena, señalando una serie de deficiencias en su capacidad de gobernar y atender las necesidades básicas de la población.
Uno de los puntos de mayor descontento es el estado de las autopistas, donde obras lentas y mal ejecutadas han generado un caos de tráfico, afectando a miles de usuarios.
Además, se critica la falta de inversión en las carreteras federales, que se encuentran en condiciones precarias, evidenciando una priorización dudosa en el uso de los recursos.
Otro aspecto preocupante es la situación de las escuelas y maestros, así como la precariedad en los hospitales, con escasez de medicinas y personal médico.
También las instalaciones de los juzgados se encuentran en condiciones deplorables, con jueces que no imparten justicia y que sólo se dedican a cobrar “moches.
Esta realidad contrasta con las promesas de campaña y genera desconfianza en la capacidad del gobierno para garantizar servicios básicos de calidad.
El reciente episodio de apagones, atribuidos a problemas en la Comisión Federal de Electricidad (CFE), ha exacerbado aún más las críticas.
La falta de un plan eficaz para prevenir y resolver estos cortes de energía refleja una gestión deficiente en un área vital para el desarrollo y bienestar de la población.