Sandra González
el buen tono
Orizaba.- La madre de familia Paola Hernández Palacios denunció omisión y negligencia por parte del director de la escuela primaria federal Benito Juárez García, Sergio Cortés, y del Supervisor de la Zona Escolar 22, Israel Tejeda; debido a que no quieren actuar en el caso de su hijo que fue tirado al suelo por otro menor, provocándole terribles lesiones en su brazo y mano derecha por lo que incluso se ve impedido de escribir y estudiar, pues ha perdido movilidad en sus dedos.
Relató que el 28 de abril, en la hora del receso, un compañero de su hijo le puso un pie para derribarlo, al caer su peso quedó en su brazo derecho lastimando su codo, por lo que lo llevó al Hospital Regional de Río Blanco en donde lo operaron y le pusieron clavos, sin embargo, no ha podido continuar con sus estudios porque perdió la movilidad de sus dedos.
En los primeros días, los maestros le hicieron sentir solidaridad e incluso prometieron ayudarla, además de implementar el seguro de estudiante, animándola a que se hiciera cargo de los gastos, pues en 8 meses se lo repondrían, “el 20 de abril le quitaron los puntos y hasta ahora nadie me ha preguntado cómo vamos y muchos padres han comentado que muerto el perro se acabó la rabia, es decir, acabado el ciclo escolar mi hijo ya no es problema de nadie”.
“El doctor me dijo que en dos semanas su brazo tiene que estar estirado, pero no es así, me lo llevé al CRIO y me piden estudios y radiografías”.
Detalló que acudió a la escuela a solicitar ayuda del director “para que la mamá del chico responsable (Sarahí González) cubra los gastos y me dicen que no porque su hijo es deportista (futbolista en el equipo Montañeses de Orizaba), entonces, ¿el mío no vale?, me dicen que aquí no hay culpables, cuando el daño es irreversible, no puede mover los dedos, y se lavan las manos diciendo que puede estudiar para maestro ¿y si no quiere eso?”.
Explicó que el 17 de mayo acudió a la Supervisión escolar zona 22 para solicitar una reunión con el responsable, “me esperé hasta el lunes y no me hablaron, fue hasta el jueves que se comunicaron conmigo para que el viernes fuera”.
Comentó que le llevó al supervisor el expediente de su hijo, y en la tarde le marcó para decirle que le había conseguido una consulta en el DIF de Orizaba, que estaba todo arreglado, cuando llegó al DIF le dijeron que no pasaría porque se brincaba el protocolo, ¿entonces no hubo cita?”.
Debido a que nadie se quiere hacer responsable acudió a la CEDH zona Córdoba-Orizaba, en donde la apoyan y le dijeron que acudiera a la Fiscalía, de ahí la mandaron con el procurador de la defensa de las niñas, niños y adolescentes en donde estudian su caso y le prometieron avances a la brevedad, resaltando que ni el supervisor ni el director hacen nada por su hijo.
