De la redacción
El Buen Tono
Orizaba.- La decisión del gobierno municipal de devolver el pago del impuesto predial realizado en enero y febrero, generó controversia entre los orizabeños y algunos analistas, quienes consideraron que esta medida tiene un trasfondo electoral. Dado que este año se llevarán a cabo elecciones para la presidencia municipal, hay quienes exigen una investigación para determinar si se trata de actos anticipados de campaña.
La devolución del predial aplicará principalmente a predios menores a 200 metros cuadrados, con pagos que no superen los 800 pesos. No obstante, el verdadero gasto para los contribuyentes suele estar en los servicios como agua potable, alcantarillado y recolección de basura, cuyo costo varía según los contratos y usos del inmueble. Desde una perspectiva urbanística, la medida parece poco efectiva, ya que el dinero devuelto difícilmente podrá destinarse a mejoras significativas en los inmuebles. Por ejemplo, una cubeta de pintura de 19 litros o un impermeabilizante superan los mil pesos.
Esto se suma a otras acciones como la credencial “Defensores de Orizaba”. Esto trae a la memoria la diferencia clásica entre un político y un estadista: “El político piensa en la siguiente elección; el estadista, en la siguiente generación”.
