Juan José Enríquez
El Buen Tono
Orizaba.- La catedrática de la Facultad de Psicología, María José García Oramas manifestó que la Universidad Veracruzana (UV) no puede ignorar la realidad migrante, ya que esta situación afecta directamente a Veracruz al ser tierra de paso, e incluso acoge a personas que se trasladan a otro país.
Durante su intervención en el conversatorio “Voces migrantes” de la Feria Internacional de Libro Universitario (FILU) 2022, destacó la importancia de organizar espacios y foros donde la sociedad conozca lo que ocurre con los migrantes en la entidad y enfatizó que las instituciones de educación superior deben formar a sus estudiantes de manera que sean sensibles a la realidad en que están inmersos.
Asimismo, asistió la vocera del colectivo Las Patronas, Norma Romero Vázquez y Eleazar Almeida, egresado de la UV y representante del albergue Casa de Pan para el Migrante, también participaron en este evento que se realizó el 6 de septiembre en la Unidad de Artes, y fue moderado por Carlos Alberto Garrido de la Calleja, del Instituto de Investigaciones
Histórico- Sociales.
En este conversatorio se dejó en claro que la actual administración de la UV iniciará un periodo de compromiso con la comunidad migrante a través de su programa de Voluntariado, mediante el cual responderá a las necesidades de acopio de los albergues veracruzanos, y les apoyará en dos temas fundamentales: la salud mental y la
asesoría legal.
Por su parte, Norma Romero mencionó que a lo largo de 27 años, el colectivo Las Patronas ha representado luz y esperanza para miles de migrantes con temores y desconfianzas, producto de las situaciones que han vivido al recorrer el país.
Compartió que aunque la asociación es conocida en el exterior; en Amatlán de los Reyes, los habitantes la ven con indiferencia y brindan poco o nulo apoyo.
“Es necesario luchar contra esta apatía y mostrar a las personas que al ayudar a alguien lo hacen con ellas mismas”.
Así también, Eleazar Almeida afirmó que cuando la política pública no responde a las necesidades de ciertos sectores de la población, a la sociedad civil organizada no le queda otra opción que utilizar los recursos propios para apoyarlos.
“Es fundamental que el conocimiento teórico enseñado en las universidades se aterrice en la realidad, crear consciencia que la investigación puede ser buena, pero no impacta si no genera resultados”, puntualizó.
