Berlín.- La crecida del río Elba provocó ayer lunes nuevos estragos y desbordamientos en el norte de Alemania y afectó asimismo a la línea ferroviaria entre Berlín, Hannover y Fráncfort, trayecto en el que se cortó el tráfico de trenes de largo recorrido.
Uno de los diques de la localidad de Fischbeck, en el este, cedió finalmente a la presión de las aguas, lo que motivó nuevas evacuaciones de miles de habitantes de la región a primeras horas de la mañana.
Los soldados y equipos de protección civil iniciaron los trabajos de construcción de un nuevo dique, de 3,5 kilómetros de largo, para tratar de impedir nuevos desbordamientos.
La situación tendió a normalizarse, por el contrario, en la ciudad de Magdeburg, la más castigada el domingo por la crecida del río, que llegó a registrar niveles de 7,5 metros, aproximadamente un metro por encima de las devastadoras inundaciones de 2002.
A lo largo del fin de semana habían sido evacuados de Magdeburg y otras localidades vecinas decenas de miles de ciudadanos.
Miles de personas tuvieron que dejar sus hogares debido a la ruptura del río Elba, mientras que vastos sectores de terrenos agrícolas eran inundados en un intento de que el agua no llegue a las casas, en medio de pronósticos de nuevas lluvias para la región.
Agencias