Agencias
CDMX.- Cada año, las festividades religiosas en la Basílica de Guadalupe, en la Ciudad de México, dejan una preocupante crisis de abandono animal. En esta ocasión, se registró el abandono de hasta 200 mascotas, principalmente perros, tras acompañar a sus dueños durante las peregrinaciones.
Muchas de estas mascotas son llevadas para acompañar a sus familias en el recorrido, pero tristemente son dejadas atrás una vez que cumplen su propósito.
Este problema refleja una preocupante falta de conciencia sobre el bienestar animal, pues cada vez más “perritos peregrinos” terminan deambulando por las inmediaciones de la Basílica, enfrentando frío, hambre y diversos peligros.
Organizaciones animalistas como Mundo Patitos, la Brigada de Vigilancia Animal y grupos de voluntarios se han movilizado para buscar soluciones y ofrecer ayuda a estos animales. Estas iniciativas incluyen rescates, atención veterinaria y campañas de adopción para garantizar que los animales encuentren hogares responsables.
“Es desgarrador ver cómo los perritos peregrinos quedan a su suerte. Muchos llegan agotados por el trayecto y terminan enfermos o heridos”, expresó un voluntario que participa en las labores de rescate.
El abandono animal durante estas fechas subraya la necesidad urgente de promover una mayor educación y empatía hacia los derechos de los animales. Mientras tanto, los esfuerzos de las organizaciones y voluntarios son fundamentales para mitigar esta crisis y ofrecer un nuevo comienzo a las mascotas olvidadas.